DROGAS DIGITALES O E-DRUGS
Imagínate la escena: te sientas cómodamente en tu silla delante del ordenador, te pones los auriculares, fijas la mirada en la pantalla, y después de 15 ó 30 minutos, estás tod@ “puest@”. Esto aseguran haber vivido much@s jóvenes que han probado una i-dosing, aunque la teoría no indica lo mismo.
Las nuevas drogas digitales son en realidad una combinación de tonos binaurales (diferentes para cada oído, en definitiva, una música repetitiva acompañada de hipnóticas y coloridas mandalas en la pantalla. Su precio ronda los 15 euros, aunque se pueden encontrar a unos precios que van desde los 7 hasta los 150 euros. Los nombres son muy variados: orgasmo, peyote, alcohol, lucid dream, éxtasis, alcohol, … Las sesiones se clasifican por temas, dependiendo de los efectos que se quieran conseguir: desarrollar la imaginación, disfrutar más de un videojuego o un deporte, aumentar el placer de las relaciones sexuales, etc…
La gente que lo ha probado dice que es una pasada, pero los expertos dicen que no es para tanto, hablan de “efecto placebo”. Realmente, los sonidos o latidos binaurales relajan, ayudan a la concentración y se usan con fines terapéuticos para enfermedades como el autismo. Incluso ciertas frecuencias pueden fomentar la creatividad o la imaginación, igual por éso algun@s dicen que han visto cosas que no existen, por ejemplo, elefantes verdes.
Lo que está claro es que no existen efectos secundarios (o por lo menos, estudios que lo demuestren, y que este tipo de experiencias no crean adicción.