Es el órgano principal responsable del placer femenino y la única parte que no envejece.

El clítoris es un órgano del aparato genital femenino. Su única función conocida es la de proporcionar placer sexual a la mujer. Su punta o glande asoma en la parte superior de la vulva, pero se extiende por el interior de los labios mayores, del perineo y rodea el tercio inferior de la vagina.

Y aunque es una de las partes del cuerpo femenino más importantes, sabemos muy poco de él y su funcionamiento.

El clítoris es como un iceberg

Solo vemos la punta, pero dentro hay mucho más: rodea el conducto vaginal y se extiende hacia los muslos. La parte que solemos ver es solamente un pequeño glande que crea la cabeza de clítoris.

Hay más de 8.000 terminaciones nerviosas solo en la punta del clítoris, el doble que en el pene

Un clítoris se compone de 18 partes distintas: una mezcla de tejido eréctil, músculos y nervios. Todas las partes trabajan juntas para crear sensaciones que muchas veces culminan en el orgasmo. Eso sí la parte del clítoris que se aloja en el túnel vaginal no tiene casi ninguna sensación, de lo contrario dar a sería insoportable.

Pueden hincharse hasta un 300%

Los clítoris varían de entre 7 y 12 cm de longitud y se pueden llegar a hinchar o inflamar de 50 a 300% su tamaño. Esto sucede en un proceso, no es que pase de cero a 100%. A medida que te acercas al orgasmo el clítoris comienza a aumentar de tamaño.

Los orgasmos del punto G y por penetración también son clitorianos

Los orgasmos son clitorales. Esto sucede porque se estimula tanto la parte interna como externa del clítoris.

Es la única parte del cuerpo que no envejece

El clítoris de una señora de 80 años funciona exactamente igual que el de una veinteañera. Eso sí, sigue creciendo, así que cuando lleguemos a viejas lo tendremos 2,5 veces más grande que cuando estábamos en el instituto.

FUENTE: www.mujerhoy.com

El consumo de cannabis se encuentra a nivel mundial en un momento de encrucijada, con diversos países donde se ha legalizado su uso recreativo y otros donde se está debatiendo. Un nuevo estudio releva las razones de por qué los riesgos de su consumo son distintos en los hombres y en las mujeres.

Esta nueva revisión de estudios en animales, publicada en Frontiers in Behavioral Neuroscience, ha revelado que las diferencias de sexo en respuesta al cannabis no son solo socioculturales, sino también biológicas. Para ello ha examinado la influencia de las hormonas sexuales, como la testosterona, el estradiol (estrógeno) y la progesterona, en el sistema endocannabinoide (las redes de células cerebrales que se comunican usando la misma familia de sustancias químicas que se encuentran en el cannabis, llamadas cannabinoides).

«Ha sido bastante difícil lograr que los animales de laboratorio se autoadministren cannabinoides como consumidores de cannabis —admite inicialmente Liana Fattore, coautora del estudio e investigadora principal del Consejo Nacional de Investigación de Italia y presidenta de la Sociedad Mediterránea de Neurociencia—. Sin embargo, los estudios en animales sobre los efectos de las hormonas sexuales y los esteroides anabólicos en el comportamiento de autoadministración de cannabinoides han contribuido mucho a nuestra comprensión actual de las diferencias sexuales en respuesta al cannabis».

Más diferencias según el sexo

Además de los antecedentes genéticos y las fluctuaciones hormonales, el informe pone de manifiesto una serie de importantes diferencias sexuales. Así, por ejemplo, los hombres tienen hasta cuatro veces más probabilidades de probar el cannabis y consumen dosis más altas con más frecuencia.

«Los esteroides sexuales masculinos aumentan el comportamiento de riesgo y suprimen el sistema de recompensa del cerebro, lo que podría explicar por qué los hombres son más propensos a probar drogas, incluido el cannabis —explica Fattore—. Esto es cierto tanto para los esteroides sexuales masculinos naturales como la testosterona y los esteroides sintéticos como la nandrolona».

Pero a pesar del menor consumo promedio de cannabis, las mujeres pasan de golpe al hábito más rápido que los hombres. De hecho, los hombres y las mujeres difieren no solo en la prevalencia y frecuencia del consumo de cannabis, el patrón y las razones de uso, sino también en la vulnerabilidad para desarrollar el trastorno por consumo de cannabis. «Las hembras parecen ser más vulnerables, a nivel neuroquímico, al desarrollar adicción al cannabis», explica Fattore.

«Los estudios en ratas muestran que la hormona femenina estradiol afecta el control del movimiento, el comportamiento social y el filtrado de la información sensorial en el cerebro, todos ellos objetivos de la toma de drogas, a través de la modulación del sistema endocannabinoide, cuya respuesta a su vez influye en la producción de estradiol —explica—. Específicamente, las ratas hembras tienen diferentes niveles de endocannabinoides y receptores más sensibles que los machos en áreas clave del cerebro relacionadas con estas funciones, con cambios significativos a lo largo del ciclo menstrual. Como resultado, las interacciones entre el sistema endocannabinoide y el nivel cerebral de dopamina, el neurotransmisor de placer y recompensa, dependen del sexo».

Edad y menstruación, factores que también influyen

La inconsistencia de las condiciones en estos estudios complica enormemente la interpretación de un papel ya complejo de las hormonas sexuales en el sistema endocannabinoide y la sensibilidad a los cannabinoides.

«Los efectos variaron según el cannabinoide específico estudiado, así como la cepa de los animales analizados y la duración de la exposición a la hormona —admite Fattore—. Sin embargo, los datos humanos hasta ahora son consistentes con la idea de que el estradiol regula la respuesta femenina a los cannabinoides. Al igual que en los animales, hombres y mujeres son diversos en su comportamiento genético y hormonal y procesan la información de manera diferente, perciben las emociones de diferentes maneras y su vulnerabilidad es distinta a desarrollar adicción a las drogas».

«Los niveles sanguíneos de las enzimas que descomponen los cannabinoides fluctúan a lo largo del ciclo menstrual de las mujeres, y los estudios de imagen muestran que los niveles cerebrales de los receptores de cannabinoides aumentan con el envejecimiento en las mujeres, reflejando en cada caso los cambios en los niveles de estradiol», añade.

Fattore cree que profundizar en la comprensión de las interacciones entre los cannabinoides y los esteroides sexuales es crucial para evaluar el impacto del aumento del consumo de cannabis y para hacer frente a las consecuencias.

«Los tratamientos de desintoxicación adaptados al género y las estrategias de prevención de recaídas para pacientes con adicción al cannabis son cada vez más solicitados. La optimización de los protocolos personalizados de prevención y tratamiento basados en la evidencia exige más investigación sobre la fuente de las disparidades sexuales en la respuesta al cannabis».

FUENTE: www.20minutos.es

Gero eta gehiago dira euren baginari bestelako itxura emateko baginoplastia edo labioplastia izeneko ebakuntzara jotzen duten emakumeak. Emakume gazteen artean, adibidez, ezpain handien zein txikien tamaina murrizteko joera nagusitzen ari da. Erresuma Batuan, adibidez, horrelako ebakuntza egin duten emakumeen kopurua bost aldiz biderkatu da azken urteetan.

Ikerketa baten arabera ez da eredutzat har daitekeen baginarik

Ez omen dago bagina ‘normalik’. Baginak hainbat itxura eta tamainakoak izan daitezke. Hori da, behintzat,Suitzako Lucerne Cantonal ospitaleko ikertzaileek 15 eta 84 urte bitarteko 657 emakumeen baginak aztertu ondoren ondorioztatu dutena. Ikerketa zuzena bada, beraz, emakumezkoen kanpo-genitalen inguruan hitz egiten denean ‘normala’ adjektiboa erabiltzeak ez luke zentzurik. Suitzarrek ikerketaren inguruko hainbat xehetasun eman dituzte ezagutzera. Ikerketa egiteko, adibidez, besteak beste, ezpain handiak, ezpain txikiak, klitoria, irekitze-baginala eta perineoa neurtu dituzte.

Ikerketan parte hartu duen Anne Kreklauk azaldu duenez, era guztietako baginak aurkitu dituzte. Ondorioz, batez besteko tamaina bat zehaztea edo bagina eredu bat zehaztea alferrikakoa izango litzatekeela onartu du. Gainera, kontuan hartu behar da ikerketan parte hartu duten emakume guztiak kaukasoarrak direla. Beste talde etnikoetako emakumeen baginak aztertuko balira, seguruenik, bariazioa handiagoa izango litzatekeela onartu dute ikerketa burutu duten adituek.

Ikertzaileek aurkitu dituzten joera bakarrak honako hauek izango lirateke: alde batetik, zenbat eta helduago orduan eta ezpain txiki eta perineo laburragoak eta, bestetik, gorputz-masa indize handiagoa duten emakumeek ezpain handi handiagoak dituztela.

Ikerketaren emaitzek hankaz gora botatzen dute hainbat emakumeren ideia. Izan ere, azken urteetan baginoplastien kopurua biderkatu da, bereziki, nerabeen artean. Printzipioz mina ekiditeko ebakuntza den arren, gero eta gehiago dira bere baginari itxura ‘hobea’ eman nahi dioten emakumeak.

FUENTE: www.gazteberri.eus

Es probablemente el órgano menos divulgado y más desplazado de la historia de la Medicina, a pesar de ser el centro del placer sexual femenino.

Posiblemente el órgano peor tratado de la historia de la Medicina, desplazado en los tratados médicos y en la cultura popular durante siglos, y relegado injustamente a un mero ‘botón’ preliminar de las relaciones sexuales, el clítoris trata ahora de recuperar su estatus como órgano central del placer sexual de la mujer.

Darle al clítoris el lugar que merece, y divulgar acerca de este órgano tan maltratado históricamente es el objetivo de Entre mis labios, mi clítoris: confidencias de un órgano misterioso, de Alexandra Hubin y Caroline Michel. Este libro hace un repaso de los primeros avances en anatomía del clítoris, y cómo este experimentó avances y retrocesos hasta situarse donde debe estar, en el centro del placer femenino.

No obstante, han tenido que pasar siglos para ello. Aunque es mucho lo que hemos avanzado desde su primera disección en 1559, todavía existen falsas creencias sobre el clítoris que han hecho mucho daño a la mujer como propietaria de su propio placer independiente de su función reproductiva, centrada en el coito.

Historia de un órgano maltratado

El hecho de que el clítoris sea un órgano que sirve exclusivamente al placer sexual ha frustrado durante siglos a los científicos, que trataban de buscar una función reproductiva, relacionada con el coito; para estos, tenía mucho más sentido que el placer se obtuviera de la estimulación vaginal.

Siglos de historia de discriminación de la principal fuente de placer femenino ha dado como resultado una colección de mitos, falacias, frustraciones y conceptos erróneos. Uno de ellos es el punto G, que tanta frustración ha provocado a millones de mujeres tratando de encontrarlo.

Hoy sabemos que el clítoris no es solo un pequeño área visible, como decíamos, sino que es un órgano mucho más grande y complejo, que se extiende varios centímetros bajo la piel, y que puede estimularse desde diferentes ángulos. Por supuesto, aunque de manera indirecta, también desde el interior de la vagina.

Sin embargo, la manera más efectiva de obtener un orgasmo es la estimulación directa de la parte externa del clítoris, el glande, vía manual o mediante la práctica del cunnilingus. Esta zona visible es solo la punta del iceberg. Es en realidad el glande de un aparato mucho más complejo, que se extiende interiormente en ramificaciones a ambos lados de la entrada de la vagina.

Por ello, es fácil que desde el interior de esta se pueda estimular algunas zonas de este complejo órgano, pero todo dependerá del tamaño y forma del clítoris, que varía en cada mujer, y de su cercanía a las paredes vaginales.

El mecanismo del placer femenino depende de muchos factores: existen muchas zonas erógenas y el placer sexual (culmine el orgasmo o no) puede obtenerse por muchas vías. Lo que los científicos ya no pueden negar es que el órgano clitoriano es la fuente de este placer.

Pero, para llegar a esta conclusión, el clítoris ha tenido que sufrir maltrato y discriminación. A continuación, algunos datos que toda persona debería conocer sobre el clítoris, curiosidades, y algo de historia.

El clítoris solo sirve para el placer

Durante décadas se ha especulado sobre la función reproductiva del clítoris en general y el orgasmo femenino en particular, sin llegar a una conclusión. No la hay. Este órgano no tiene ninguna otra función más que proporcionar placer; y, desde luego, no posee una función reproductiva.

No obstante, algunos biólogos han especulado en ocasiones que el orgasmo femenino tendría una utilidad: las contracciones de la vagina en este momento ayudarían al esperma a alcanzar las trompas de Falopio para fecundar a un óvulo.

El orgasmo vaginal es un mito

Hoy podemos afirmar que no existen dos tipos de orgasmos, sino uno solo. Eso sí, existen diferentes formas de obtenerlo.

El cuerpo de la mujer tiene muchas zonas erógenas, y caricias de diferente naturaleza pueden abrir un mundo de posibilidades a la hora de alcanzar un orgasmo.

No hace muchos años era común y aceptada la pregunta: ‘¿eres clitoridiana o vaginal?’ La mayoría de las mujeres no se sentirían identificadas con la última acepción. Eso es debido a que lo que comúnmente se conoce como orgasmo vaginal, técnicamente, no existe, sino que es producto de la estimulación del clítoris desde el interior de la vagina.

El tamaño sí importa

Si bien se ha escrito mucho sobre el tamaño del pene y su relación con el orgasmo masculino, ¿qué hay del clítoris? La obra de Hubin y Michel revela que las mujeres que tienen un glande de mayor tamaño y situado más cerca de la entrada de la vagina disfrutan de orgasmos con más facilidad.

Es posible que la razón de esto sea que la fricción entre las zonas es más asequible.

El clítoris también tiene erecciones

Al igual que le ocurre al pene, la excitación sexual provoca que todo el órgano se llene de sangre y se hinche. En este momento, el glande ‘sale de su capuchón’ y aumenta de tamaño.

Durante la fase REM, como también ocurre en los hombres, es posible que el clítoris se hinche y esta reacción se acompañe de lubricación vaginal, un hecho que no tiene por qué ir relacionado con un sueño de carácter erótico.


El clítoris también tiene glande

Efectivamente, el glande del clítoris es esa parte visible, situada por encima de la abertura de la vagina y de la uretra, y cubierto de una especie de capuchón de piel, llamado prepucio.

Este mal llamado ‘botoncito’ es solo la parte visible de un órgano mucho más sofisticado que se extiende varios centímetros en el interior del cuerpo de la mujer.

Mide de media 1 centímetro y posee miles de terminaciones nerviosas.

Cada clítoris es diferente

El órgano entero mide una media de 9 a 11 centímetros, y el glande, como mucho, 1 centímetro. Cada mujer tiene su propio glande, y es tan diferente como cualquier otra parte del cuerpo, como la nariz: única e indistinguible.

La penetración no es la mejor forma de obtener el orgasmo

Las mujeres alcanzan más fácilmente el orgasmo cuando reciben múltiples estimulaciones, según un estudio publicado por The Journal of Sex Research en 2006, solo el 49,9% de las mujeres llegan al orgasmo únicamente mediante la penetración vaginal. En cambio, cuando la penetración se acompaña de estimulación manual, la cifra era del 70,9% y alcanzaba el 72,8% cuando se acompañaba de estímulos orales.

El órgano menos divulgado

Si bien el órgano reproductivo femenino se ha representado con frecuencia, y de hecho es materia importante en los libros de texto escolares, no ocurre lo mismo con el órgano del placer.

Según la publicación de Hubin y Michel, el 84% de las niñas de 13 años no sabe representar su sexo (aunque el 54% sí sabe representar el masculino). Por otro lado, una de cada cuatro chicas de 15 años desconoce la existencia de su clítoris.
Estuvo a punto de denominarse ‘órgano de Falopio’

La primera vez que se diseccionó el clítoris fue en 1559 a cago del investigador italiano Mateo Realdo Colombo, como plasmó en su obra De Re Anatomica.

No obstante, de no ser por esta publicación, tal vez hubiéramos llamado a este órgano de otra forma que, además, nos resulta familiar. Su colega, el también anatomista italiano Gabriel Falopio (quien dio nombre a otra parte de la anatomía femenina, las trompas) trató de robarle el mérito a Colombo.

Freud, enemigo número 1 del clítoris

En 1850, el descubrimiento de la ovulación y de los detalles sobre la reproducción sexual humana (óvulo y espermatozoide), quedó demostrado que el clítoris no tenía utilidad reproductiva: solo servía para el placer.

A comienzos del siglo XX, Sigmund Freud sostuvo que las mujeres que disfrutaban con el clítoris eran inmaduras, incluso, neuróticas.

La primera recreación en 3D del clítoris

Gracias a la investigadora Odile Fillod, obtuvimos la primera reconstrucción del clítoris en 3D en el año 2015.

FUENTE: www.muyinteresante.es

Un estudio que revela lo que las mujeres, en el caso de la investigación, las hembras rechazan de su pareja sexual, ¿quieres descubrirlo? Fíjate bien en lo que unos científicos canadienses han observado en un grupo de roedores.

El rechazo que despierta una pareja sexual estresada

Un grupo de investigadores de las universidades de Ontario y Binghamton en Canadá observó el comportamiento sexual de las ratas. Estos descubrieron que cuando un ratón pasa una adolescencia estresante, presenta un comportamiento pasivo cuando es adulto. Esto no les beneficia nada en su vida amorosa, porque las ratas rechazan dicha actitud vital.

Para llegar a esta conclusión, los científicos sometieron a estrés a un grupo de ratones durante su desarrollo, en la adolescencia. El procedimiento consistió en cambiar sus compañeros de jaula regularmente, de manera que se ponía a prueba su liderazgo. Más tarde, se creaba un espacio para el apareamiento, donde se introducía a una hembra, junto con un ratón que había sufrido ansiedad durante su adolescencia y otro que no.

Ya podréis imaginar el resultado. Las hembras preferían al segundo como pareja sexual. Identificaban perfectamente los comportamientos dominantes y sumisos y optaban por el más seguro de sí mismo.

La directora afirma que las conclusiones podrían aplicarse a los humanos

Cameron declara creo que este estudio puede llevarnos a un mejor entendimiento de las funciones reproductivos de los mamíferos, incluyendo a los humanos. Además, cuentan con el apoyo de un estudio similar en 2015, en el que se descubrió que los niveles de estrés influían en cómo nos veían los demás. Del mismo modo que la aportación de los canadienses, cuanta más ansiedad trasluces, menos posibilidades tienes de ser elegido como pareja sexual.

Resulta sorprendente que cuando estamos menos atractivos, el cortisol y la glucosa aumenta, al tiempo que se frena el crecimiento muscular y óseo. Por tanto, tenemos un aspecto menos saludable y menos sensual. No identificaron cuáles eran las manifestaciones faciales de dicha situación, pero sospechan que están en la misma línea.

Tras ello, pudieron aseverar que los hombres que se manejan mejor en situaciones de estrés son más atractivos para las mujeres. Según afirman, la razón reside en que ellas prefieren que su pareja sexual presente esta característica. La misma implica una mayor adaptación a los avatares de la vida, lo que constituye el primer paso para solucionarlos. Además, inconscientemente creen que dicha habilidad se transmitirá a las siguientes generaciones.

A partir de estos dos estudios, Cameron se propone realizar un experimento similar, pero con animales que no hayan recibido cuidados maternales. Posteriormente colocarlos en situaciones de ansiedad. ¿Qué ocurrirá en este caso? ¿Serán menos atractivos? ¿Cómo afectará a otras facetas de la vida, como su capacidad cognitiva?

En cualquier caso, parece claro que las mujeres buscamos alguien que no parezca superado por la ansiedad o el estrés, es decir, que no se deje vencer por la adversidad cuando ésta se presente y sepa avanzar. No está mal para un compañero de vida, sea hombre o mujer, ¿no te parece? ¿Tú que piensas?

FUENTE: www.supercurioso.com

La lubricación vaginal es fundamental a la hora de mantener relaciones sexuales y es producida por los órganos femeninos. En ocasiones resulta complicado lubricar, por lo que es necesario utilizar otro tipo de lubricantes.

La lubricación vaginal es una característica de los órganos sexuales femeninos y se produce por la segregación del flujo vaginal, un líquido expulsado por el cuello de la matriz y las paredes de la vagina. Cuando ésta se produce en los labios, en cambio, se debe a las glándulas de Bartolino.

La lubricación femenina tiene varias finalidades. Una de ellas es la de ejercer como antibiótico natural manteniendo la vagina a salvo de infecciones. El flujo vaginal además es un lubricante que favorece la función del clítoris.

Una lubricación escasa puede ser causa de infecciones en la vagina además de disminuir el apetito sexual en la mujer, por lo que no es fácil que llegue al orgasmo. Este tipo de síntomas pueden aparecer, por ejemplo, durante la menopausia o después del embarazo. También, la insuficiente lubricación femenina puede ser una traba para la realización del coito, siendo doloroso casi siempre. Si la ausencia o escasez de flujo se da durante la práctica sexual es uno de los motivos principales del dolor durante el acto y puede estar originado por múltiples causas, principalmente orgánicas o psíquicas, como una falta de motivación, posiblemente subsanable participando en preámbulos o juegos sexuales o utilizando lubricantes.

Qué son los lubricantes

El lubricante íntimo o lubricante vaginal es una sustancia aceitosa o grasa que se utiliza para reducir la fricción en órganos sexuales en el momento de tener contacto íntimo y penetración en esas áreas.

Los lubricantes han pasado a ser un complemento imprescindible en la vida sexual de muchas parejas. Representan una gran ayuda, no solo para las mujeres maduras, sino para todas las edades. Además, gracias a la industria del juguete erótico que les ha añadido sabores, olores y propiedades afrodisíacas, los lubricantes se han convertido en juguetes sexuales divertidos y facilitadores a la hora de conseguir un orgasmo satisfactorio.

¿Tienen las mujeres que usar lubricantes?

Si el motivo del uso del lubricante es debido a la sequedad vaginal la mujer tiene que usar lubricante. La razón es porque la falta de lubricación femenina puede ser motivo de infecciones vaginales y de dolor durante la penetración.

En general, los especialistas les recomiendan estos productos a las mujeres que están en la menopausia y tienen las molestias propias de la sequedad vaginal que puede ocurrir durante esta etapa debido a los cambios hormonales y la disminución de los estrógenos. También puede darse este caso en otras etapas de la vida en las que haya cambios drásticos hormonales: embarazo y lactancia. En menor medida, otras causas de cambios hormonales en las mujeres son el ciclo menstrual, el estrés y algunos medicamentos.

También las mujeres podrían necesitar lubricantes para facilitar el sexo con el uso de preservativos o para potenciar el placer y poder llegar al orgasmo. Eso sí, el lubricante apropiado para unos casos no siempre es el mismo que para los otros.

Hace unos años, los lubricantes sólo se usaban para el sexo anal o en situaciones donde la lubricación natural no era suficiente. Hoy son una buena opción ante la sequedad vaginal, pero también nos pueden ayudar a que la relación sea más placentera, lubricando la zona y ayudando a que el preservativo no se rompa. Por ello, no sólo es un producto para mujeres de mediana edad sino que las jóvenes también lo utilizan.

Diferentes tipos de lubricantes

Existen lubricantes funcionales y lubricantes lúdicos. Los lubricantes funcionales son los que sirven para aminorar la sequedad vaginal y los lubricantes lúdicos son los que tienen sabores y aromas y sirven para hacer más divertido el sexo y estimular el orgasmo.

Según cuales sean los componentes del lubricante, podemos hablar de los siguientes tipos:

  1. Lubricantes vaginales a base de agua: En general, esta es la opción preferida por las mujeres después de varios estudios, no ya porque es de fácil limpieza, no mancha las telas y resulta seguro para utilizar junto al condón, sino porque aseguran que son lo que ofrecen mayor satisfacción y placer. De todas maneras, existen algunos lubricantes vaginales acuosos con sabores y aromas que pueden generar irritación tanto en la vagina como en el pene. Pero son los únicos altamente recomendados para utilizar con preservativos o diafragmas.
  2. Lubricantes vaginales a base de aceite: Dentro de los lubricantes vaginales a base de aceite figuran el aceite de oliva, la manteca y mantequilla. Los mayores riesgos de estos lubricantes vaginales radican en que pueden generar daños a los anticonceptivos de látex como los preservativos o el diafragma femenino, pero son seguros a nivel médico ya que pueden usarse dentro de la vagina.
  3. Lubricantes a base de petróleo: Dentro de este grupo está la vaselina y el aceite de bebé, que no sirven como lubricantes vaginales porque pueden generar irritación de la membrana que la cubre y generar cambios en el ph natural de esta zona genital, llegando a provocar infecciones. Los lubricantes a base de petróleo no deben combinarse con condones o diafragmas, debido a que estos productos destruyen el látex con mucha velocidad, permitiendo que se filtre esperma o infecciones de transmisión sexual.
  4. Lubricantes de silicona: Los lubricantes en base a silicona suelen ser viscosos, duran el tiempo suficiente y son libres de petróleo. Esto hace que los lubricantes con base de silicona sean elegidos por muchas parejas que opinan que lubrican mejor y duran más tiempo, con lo que se consigue mucho más placer en la penetración. Hay que leer en las indicaciones si son aptos para utilizar junto con el látex de los preservativos, diafragmas o juguetes sexuales.
  5. Lubricantes caseros: Las cremas de leche, los dulces, helados y jaleas con sabores a frutas. No deben utilizarse en el interior de los órganos sexuales y tampoco durante el coito. Pueden ser un complemento excitante para el sexo oral, pero no para el coito ya que puede raspar, irritar y lastimar las mucosas. Dentro de este grupo tenemos los lubricantes naturales a base de agua o aceites naturales que nosotras mismas podemos fabricar: el aceite de coco o el gel de áloe vera, cuyas recetas podemos encontrar fácilmente en la red.

Consejos y sugerencias

Lo primero que debemos hacer ante un caso de sequedad vaginal es consultar con el médico para descartar cualquier enfermedad, que necesitara una medicación adecuada.

Para conseguir una correcta lubricación femenina vaginal natural debemos seguir unas pautas de vida adecuadas: beber suficiente agua, tener cuidado con los productos que utilizamos (el detergente de lavar la ropa, el material de los condones, verificar que no se tenga alergia a ningún ingrediente…), llevar una dieta saludable, tomar suficiente Vitamina E y, sobretodo, olvidar del estrés.

Si finalmente, vamos a usar lubricantes, un consejo a seguir es utilizar un lubricante isosmolar ya que contienen la misma composición que las células, por lo que no producen sequedad ni desequilibrios de pH.

Por supuesto, hay que adquirir el producto en puntos de venta especializados como farmacias, condonerías o Sex Shops.

En algunas ocasiones, si el lubricante no es el adecuado, pueden producirse reacciones no esperadas, como más sequedad vaginal, infecciones en la vagina, roturas del preservativo, diafragma o dispositivos de látex o reacciones alérgicas, entre otras.

Si el pene de tu pareja es de gran tamaño o tu vagina muy estrecha el lubricante es una forma muy acertada de prevenir el dolor postcoital.

Por otro lado, como decíamos antes, suele ser un aliado indispensable para una penetración anal, ya que aunque cause placer, el ano no forma parte de los órganos sexuales y no está preparado para la penetración. Aunque se pueda excitar y dilatar, no tiene función lubricante.

Está recomendada su utilización con los juguetes sexuales y otros objetos, ya que el gel lubricante proporciona un contacto más suave y permite evitar la irritación causada por una utilización prolongada.

Cuando utilices el lubricante lava tu vagina después de la relación sexual.

Aplica un poco en la punta del pene sobre el condón antes de tener relaciones sexuales.

Utiliza poco producto porque utilizar demasiado no proporciona más placer y puede provocar que el preservativo se salga o que la vagina se irrite.

Guarda el envase del producto en un lugar seguro, fresco y seco y no lo utilices si está caducado.

FUENTE: www.bekiapareja.com

Todos tenemos vocecillas internas que nos machacan y pueden convertirse en nuestros peores enemigos. Funcionan para todo pero son expertas en arruinarnos la autoestima y el sexo. Los expertos han identificado cinco de estos pequeños dictadores internos capaces de acabar con la libido y hasta con nuestra relación de pareja. El modo en que uno se habla a sí mismo (las voces internas) afecta a nuestro comportamiento y también a la manera en la que intimamos con otras personas. Veamos de dónde vienen estos malos pensamientos.

Temes sentirte juzgada. En el tema del sexo es un miedo muy común que se exacerba porque desconocemos la experiencia sexual del otro, lo que le gusta y lo que no. Antes de preguntar preferimos parecer «normales» y filtramos (o censuramos) nuestros deseos para no alterar lo que suponemos que es normal y correcto. Entre este comportamiento y la realidad de lo que pasa por nuestra mente puede haber cientos de kilómetros de distancia.

Los terapeutas recomiendan hacer una lista de nuestros gustos en materia sexual para tenerlos claros y luego buscar el mejor modo de explicarlos a nuestra pareja.

Eres insegura. La inseguridad es el gran enemigo de tu vida sexual y viene disfrazada de múltiples maneras. Puede ser que no te gusten tus pechos o que creas que tus caderas son demasiado anchas o que te afecte el hecho de que no estés impecablemente depilada … Cualquier excusa es buena para alimentar el monstruo de la inseguridad. Quizá no te atrevas a pedir algo a tu pareja porque creas que a él no le va a gustar. Es algo habitual en las personas que acuden a la consulta para hablar de sus problemas sexuales. No quieren perder a su pareja pero sienten que, sexualmente, cada uno está en un sitio diferente y son incapaces de hablarlo.

Realmente no sabes lo que quieres (en material sexual). Si no te conoces bien es posible que aún no sepas qué es lo que te gusta sexualmente y tengas mil dudas. En ese caso es normal que tengas problemas a la hora de hablar claramente de tus gustos con tu pareja porque estás atascada en un estado de confusión perpetuo. Para estos casos los terapeutas recomiendan algo de literatura erótica (de calidad), hablar de sexo con amigos o probar con algún juguete sexual. Se trata de explorar hasta encontrar el punto de satisfacción y excitación para después poder aplicarlo a la vida en pareja.

Tienes miedo al rechazo. Una de las razones más comunes por la que las personas no expresan sus verdaderos deseos es el miedo a la palabra «no». Los expertos recomiendan que no nos tomemos ese «no» como algo personal porque la mayoría de las veces tiene que ver con las experiencias del otro y no contigo, pues es probable que esa persona esté poniendo unos límites que necesita para él (o ella), independientemente de ti. Aprender a escuchar una negativa por respuesta y que eso no te hiera es una herramienta que debemos cultivar, especialmente para tener una buena vida sexual.

Estás haciendo lo que piensas que debes hacer. Socialmente hay unos referentes de lo que es correcto y de lo que no en el comportamiento sexual. Quizá por ajustarte a esos patrones estés dejando de prestar atención a tu cuerpo y a tus deseos. Un ejemplo. Hemos visto en cientos de películas que el sexo termina cuando el hombre eyacula. Y esto exige a la mujer que tenga orgasmos vaginales, algo que no sucede a todas las mujeres.

FUENTE: www.mujerhoy.com

La regla la tenemos casi todas las mujeres, pero a veces sabemos poco sobre ella.

regla3La regla o menstruación es el sangrado mensual que se produce durante toda la vida fértil de una mujer. Cada 28 días el cuerpo de las mujeres se prepara para un embarazo y cuando este no se produce aparece el sangrado vaginal que no es otra cosa que la eliminación del revestimiento del útero que se había preparado para el embrión.

En realidad, el ciclo menstrual es algo que forma parte de la vida de las mujeres hasta que alcanzan la menopausia, pero no se conocen tantas cosas como se deberían sobre él. En ese sentido, desde Centro Mujer queremos aportar nuestro granito de arena y mostrarte algunas de las curiosidades que quizás se te escapaba, así como información de gran utilidad sobre tu regla.

Ciclo menstrual en las mujeres

Un ciclo menstrual dura más o menos 28 días y el sangrado marca el inicio del ciclo que se puede dividir en tres etapas:

  • Hemorrágica. Cuando se produce el sangrado
  • Folicular. Es la etapa en que el endometrio se prepara para un posible embarazo
  • Secretora. En esta etapa se liberan las hormonas si se ha producido un embarazo, o se libera el revestimiento del endometrio cuando no se produce el embarazo.

La regla

Los síntomas de la regla comienzan en la 2ª etapa del ciclo, entre el día 14 y el 28 y varían en cada mujer, pero lo normal es que desaparezcan a los cuatro días de iniciarse la regla. El síndrome pre-menstrual comienza a notarse más o menos cinco días antes de la regla. Los síntomas de la regla pueden ser a nivel físico y a nivel emocional.

images649n50e2Nivel físico

  • Dolores de cabeza
  • Dolores musculares
  • Dolor en las articulaciones
  • Sensibilidad e hinchazón en los senos
  • Hinchazón en manos y pies
  • Cansancio
  • Diarrea
  • Retención de líquidos
  • Acné

Nivel emocional

  • Depresión
  • Sensibilidad
  • Cambios en el estado de ánimo
  • Insomnio
  • Nerviosismo
  • Irritabilidad

Síntomas de la regla y sus problemas

Para aliviar los síntomas de la regla puedes tener en cuenta las siguientes recomendaciones:

  1. Sigue una dieta equilibrada y evita el exceso de grasas y azúcares
  2. Manténte bien hidratada bebiendo entre  1,5 y 2 litros de agua al día
  3. Reduce el estrés
  4. Haz algún ejercicio físico o por lo menos camina todos los días al menos 30 minutos

Remedios naturales para combatir el dolor

imagesr60qrtd3Para aliviar el dolor puedes tomar los siguientes remedios naturales:

  1.  Toma infusiones de canela, manzanilla y onagra. La canela te ayudará a regular el ciclo menstrual, la manzanilla te aliviará los dolores menstruales y la onagra favorece la relajación del útero.
  2. Inhala la esencia de plantas como la mejorana, enebro, melissa, menta, romero…
  3. Aplica calor en la zona del vientre mediante almohadillas térmicas o bolsas de agua caliente.
  4. Toma un baño de agua caliente
  5. Masajea la zona abdominal y lumbar con aceites esenciales de romero, salvia o ciprés
  6. Consume alimentos ricos en fibra y hierro
  7. Evita el consumo de alcohol y café
  8. Consume onagra que es conocida como “la planta de la mujer” pues posee un efecto antiinflamatorio y regula las hormonas femeninas.

Falsos mitos sobre la regla

  1.  La menstruación no es un proceso de limpieza del organismo, es un proceso de regeneración del organismo para adaptarse a un posible embarazo.
  2. No se deben tocar las plantas cuando se tiene la regla pues pueden morir
  3. Si te bañas, se puede cortar la menstruación y no vuelve hasta el siguiente ciclo.
  4. No debes hacer ejercicio mientras tienes la regla, este era uno de los consejos favoritos de nuestras abuelas, pero hoy sabemos que el hacer ejercicio libera endorfinas que te ayudan a aliviar el dolor
  5. Cuando tienes la regla te encuentras baja de defensas. La sangre que recubre el útero no proviene de otras partes del cuerpo
  6. Las mujeres vírgenes no deben usar tampones porque se les puede romper el himen, pero esto no es verdad.
  7. El tampón es lo mejor para la regla. El tampón es muy cómodo, pero no es bueno utilizarlo siempre pues con el tampón la sangre queda retenida por horas. No es aconsejable dormir con él ni tampoco mantenerlo más de 4 horas en el interior
  8. Durante la regla es imposible quedarse embarazada pues se está eliminando el óvulo y el revestimiento del endometrio, pero esto no es verdad, pues los espermatozoides pueden quedar atrapados en el moco uterino y pueden fecundar un futuro óvulo
  9. La regla hace que se corte la mayonesa.

FUENTE: www.centromujer.republica.com

Una de las preguntas más comunes que suelen hacerse muchas mujeres es por qué no logran alcanzar el orgasmo. Un reciente estudio ha hallado la respuesta: todo se debe a la forma de la vagina.

4187e567423682b4aa8cf82e4f1129c1Son múltiples los libros, los manuales y los profesionales que han hablado sobre las diferentes posturas que se deben adoptar durante las relaciones sexuales con el fin de alcanzar el orgasmo, sobre todo en el caso de la mujer. Muchos atribuyen esta dificultad a bloqueos psicológicos, mientras que otros opinan que esto se debe a una deficiente calidad de la práctica erótica. Pero, ¿qué sucedería si se conociera que todo se debe a la forma de la vulva? Según un estudio reciente, publicado en el Clinical Anatomy, la anatomía de cada mujer parece ser la que origina la diferencia, y el clítoris es la estructura principalmente implicada. Si este se encuentra a una distancia igual o inferior a 2,5 centímetros del tracto urinario, esas mujeres podrán llegar al orgasmo a través del coito, o penetración. Si bien, si la distancia es superior, es poco probable que logre alcanzar el clímax si no tiene una estimulación directa de esta zona genital.

¿Por qué influye tanto la distancia entre el clítoris y el tracto urinario? Porque cuanto más cerca se encuentre, más estimulación recibirá a la hora de la penetración. Si se encuentra más lejos, no será rozado con la misma intensidad. De todas formas hay que dejar claro que aunque no se alcance el orgasmo a través del coito esto no impide poder disfrutar de unas relaciones sexuales plenas y completamente satisfactorias. La anatomía de cada mujer no es un impedimento, si no que es un descubrimiento diferente que debe aprender a conocerse para saber disfrutar de él al máximo.

Una recomendación sería realizar un juego consistente en la autoexploración y el autoconocimiento. En este caso se privaría a la pareja de roces o caricias a nivel genital y se propiciaría todo tipo de tocamiento en el resto del cuerpo, con el fin de descubrir otros lugares que desencadenen tanto o más placer que los que ya se conocen. A veces nos focalizamos demasiado en lo ya conocido y descuidamos todo el amplio abanico de sensaciones que nos proporciona el órgano más grande que poseemos, la piel.

FUENTE: www.muyinteresante.es

Ser mujer no es fácil, tenemos que pasar por tantas cosas desde que menstruamos por primera vez… A partir de allí, cada mes nos toca atravesar cambios de humor, hormonales y mucho dolor, para algunas. Nos preguntamos una y otra vez: “¿Por qué duele tanto el período menstrual?”. Pues la razón parece estar más clara que nunca y te la explicamos.

Por esta razón duele tanto el período menstrual

imagesGIUAOI8QEn ocasiones el dolor puede ser tan intenso que impide tener un día normal, nos irrita y hace llorar, si no se consigue alivio con los medicamentos anti inflamatorios. Es realmente molesto. Al fin, los científicos parece que consiguieron una respuesta al dolor durante la menstruación. La mayoría de las mujeres sufrimos del síndrome premenstrual. Los síntomas antes de “esos días” incluyen dolores en la zona abdominal, cambios de humor, sensibilidad en los senos, depresión, antojos… en pocas palabras, nos volvemos insoportables.

Si mencionamos el síndrome premenstrual, es porque aproximadamente el 80 % de las féminas nos vemos afectadas. Un estudio realizado por investigadores de la Universidad de California, publicado en Journal of Women’s Health, indica que hay una relación entre la hinchazón y los síntomas antes de la menstruación.

Se necesitaron 2939 mujeres estadounidenses para la investigación, donde descubrieron la relación que tiene el síndrome premenstrual y la proteína C reactiva ultra sensible (PCR-us), que también es un biomarcador de inflamación. Esta proteína aumenta su nivel cuando tenemos hinchazón, por ello se le considera que tiene mucho que ver en cuanto al dolor.

Mientras aumenten los niveles de la PCR-us, mayor inflamación tendremos. Es decir, más dolores y un síndrome premenstrual peor que el habitual. A veces duele tanto el período menstrual que solo es comparable con un ataque al corazón, según un profesor de la Universidad College London. Más o menos para que un hombre entienda lo que se puede llegar a sentir.

El resultado final del estudio es apenas un abrebocas de lo que se podría llegar a saber más adelante con futuras investigaciones. Quizá inventen un anti inflamatorio más eficaz. Tal vez se pueda descubrir cómo disminuir los síntomas antes, durante y después del período menstrual. Lo importante es que ya sabemos qué responder cuando nos preguntemos por qué duele tanto.

FUENTE: www.supercurioso.com