Controla lo que te metes. Es muy difícil controlar la pureza de esta droga, por ello, se debe tomar muy poco por el riesgo de sobredosis.
Evita el consumo intravenoso.
Si no lo evitas, no compartas la jeringuilla, ni otros utensilios de consumo, así no compartirás otras cosas. Hazlo de la forma más higiénica posible.
No reutilices las jeringuillas, intercámbiala por una nueva.
Debes estar pendiente de tu estado y tus relaciones sociales y familiares.
Date alguna vuelta por centros de tratamientos para conocer tu estado sanitario y alternativas a tu consumo.
Intenta no mezclarla con otras drogas, puede ser un cóctel explosivo.
DEBES SABER QUE:
La fuerte dependencia, su alto precio y la falta de información, ha llevado a much@s consumidor@s a cometer, delitos y pasar por prisión, a descuidarse sanitariamente, contraer enfermedades incurables, a perder lazos familiares, y al rechazo social.
Muchos heroinóman@s han perdido todo y lo único que les queda es la heroína. Sin apoyo será difícil que mejoren sus condiciones de vida.
Muchos heroinóman@s hoy ya no están con nosotr@s, víctimas de la forma en la que la han consumido.