Píldoras anticonceptivas y tabaco

Una de las interacciones con medicación que se pueden dar si se fuma es con las píldoras anticonceptivas. Hace tiempo que hicimos un artículo con algunas cuestiones genéricas sobre píldoras anticonceptivas y otras sustancias, pero creemos interesante hablar específicamente sobre la relación de las píldoras anticonceptivas con el tabaco.

Como ya sabéis, una de las cosas a tener en cuenta cuando se consume cualquier sustancia (incluso aquellas que son más habituales) es la interacción con otras sustancias o medicamentos. Y es que estas interacciones pueden hacer que los efectos buscados o deseados del consumo sean menos intensos, o que éstos sean menos duraderos, o todo lo contrario, que sean más intensos y/o que duren más.

Además, las interacciones también pueden acarrear una mayor asunción de riesgos, porque en algunos casos supone asumir los riesgos de ambas sustancias, y en otros incluso puede suponer que aparezcan nuevos riesgos que consumiendo las sustancias por separado no existen.

El tabaco es la sustancia más consumida, por detrás del alcohol, tanto por hombres como por mujeres (y creemos que por personas no binarias, pero las estadísticas aún no lo recogen), tanto si se pregunta por el consumo en los últimos 30 días , como en los últimos 12 meses como alguna vez en la vida (como indica el estudio EDADES 2022).

En 2018 (que son los datos más recientes que hay), había 2 millones y medio de personas con capacidad de gestar y edad para hacerlo que seguían algún método anticonceptivo de base hormonal. Si bien es cierto que no todas consumían píldoras (también se contemplan otros métodos como DIU hormonal o parches), sí podemos intuir que gran parte consumía píldoras anticonceptivas, y es que los motivos para consumirlas son variados, y algunas veces se recetan con mucha facilidad: anticoncepción, reducción de acné, regular la menstruación, reducir los dolores menstruales…

Paralelamente, y sin tener datos que correlacionen estos consumos, hay un 27,8% de mujeres de entre 15 y 64 años que consumen tabaco de forma diaria según EDADES 2022. Esto nos hace pensar que puede ser interesante conocer estas interacciones entre píldoras anticonceptivas y tabaco, ya que su consumo son dos condiciones que afectan a un cuarto de la población de estudio y en el otro a casi un tercio.

Para empezar, y como ya sabéis porque se repite una y otra vez, el consumo de tabaco es un factor de riesgo para desarrollar diferentes tipos de enfermedades como cáncer de diferentes tipos (pulmón, faringe, lengua…) o enfermedades coronarias (ictus, trombosis…). Y por su parte, el consumo de píldoras anticonceptivas, que quizá se conoce algo menos y es muy importante que se diga, también aumenta el riesgo de padecer algunos tipos de cáncer (como el cáncer de pecho y el de cuello uterino) y enfermedades cardiovasculares. Por tanto, el consumo de las dos sustancias provoca un mayor riesgo de desarrollar alguna de estas enfermedades.

Por otro lado, según un reciente estudio, el consumo de píldoras anticonceptivas provoca una mayor metabolización de la nicotina. ¿Qué significa esto? Que ésta se elimina más rápidamente del cuerpo. Y aunque podría parecer una buena noticia, no lo es. Una mayor metabolización de la nicotina puede significar un patrón de consumo más intenso, ya que puede causar una mayor dependencia en la nicotina: si se elimina más deprisa, dura menos en la sangre, apareciendo el síndrome de abstinencia más rápidamente, pudiendo comportar, como decíamos, un consumo más intensivo de tabaco.

Además, por si fuera poco, esta mayor metabolización, dependiendo del momento del ciclo menstrual y el tipo de píldora anticonceptiva, produce mayores efectos gratificantes en el consumo, reforzando aún más el tabaquismo. Así, el consumo de píldoras anticonceptivas también puede suponer una mayor dificultad para dejar de fumar y abandonar el hábito. Es importante decir que, en la otra dirección, hoy día no hay ningún estudio que diga que el consumo de anticonceptivos orales vea reducida su eficacia cuando se consume tabaco.

Pero aunque no afecta directamente a la anticoncepción, y por tanto se podría pensar que no existe ninguna interacción relevante de efectos inmediatos, sí que es relevante saber que puede influir en otras cosas; como en los riesgos de padecer alguna enfermedad o afección de salud, al provocar una mayor dependencia al tabaco o incluso aumentar la dificultad para abandonar su consumo.

Plantearnos revisar qué píldoras anticonceptivas tomamos y cómo se adecuan a nosotros, poder pedir información detallada a nuestra doctora o doctor, entender factores que hacen que tengamos una relación más intensiva con el tabaco o encontrar más razones para dejar de fumar… siempre serán buenas ideas.

FUENTE: laclara.info