sexo, drogas y Rock & roll

Masturbación

pajilla

¿QUÉ ES?

Obtener placer con un@ mism@ a través del propio cuerpo, aunque seguramente ensoñando, anhelando, deseando y excitándose con un alguien  (real o virtual).

“Es el sexo con alguien a quien amas” (Woody Allen).

No es ni bueno ni malo, se trata de una vivencia subjetiva, casi siempre grata y gozosa. Te permite conocer tu propio cuerpo, lo que te gusta y cómo te gusta.

Existen muchas razones para masturbarse: ayuda a conocer el propio cuerpo, a experimentar (vivir experiencias y hacer experimentos), a relajarse, a dormirse, a entretenerse, a desenfadarse, a quitar el dolor de la regla, a conocer las fantasías…

Los chicos se hacen pajas y las chicas dedos.  Básicamente los chicos estimulan el pene con movimientos de zambomba. Las chicas estimulan el clítoris con movimientos circulares y/o pendulares.

Los chicos que no se masturban no son unos frikis y las chicas que se masturban no son unas guarras.

A los 16 años casi el 97% de los chicos lo hacen con más o menos frecuencia y a lo largo de su vida no abandonarán la práctica (a lo sumo cambiará la frecuencia). A los 16 años, menos del 30% de las chicas han probado la masturbación. Muchas comienzan a practicarla más tarde. A lo largo de toda la vida un 65% de mujeres conocen la masturbación privada.

No olvides que existe la masturbación recíproca (antes, durante y después; en vez de; a pesar de; en combinación con;…).

TÚ A MI Y YO A TI…

Algunas sugerencias para masturbar a tu pareja, además de que junt@s descubráis qué os gusta y cómo:

Para masturbar a un “él” (expertos en Joistick):

No vayas directamente al grano y no montes “la tienda de campaña” allí. Sigue paseando por su geografía corporal.

Busca una postura cómoda para ti y para él/ella.

Para no  hacerle daño, asegúrate de que está en todo momento lubricado. Puedes utilizar saliva.

El ritmo (la velocidad de la muñeca), la presión (la fuerza de la mano) y la profundidad (el recorrido del prepucio) son importantes.

Deja que él con sus manos y sus gestos te ayuden, te corrija o te enseñe. Puedes coger su mano y ponerla sobre la tuya para que él te guíe…

TODO ES CUESTIÓN DE PRÁCTICA!!!

Su excitación es más rápida, su orgasmo más corto.

Para masturbar a una “ella” (carné de conducir clítoris):

No vayas directamente al grano. Es tan importante la melodía como el acompañamiento. No montes la tienda campaña. Sigue paseando por su geografía corporal.

Si llegas a su vulva antes de que esté excitada, metes la pata. Y recuerda que en este juego “si metes la pata,  no metas la polla”. Evita la impaciencia y la ansiedad. Si no puedes lograrlo, disimula y hazte el relajado.

Para excitar a las chicas dos trucos: a) marcha corta y motor no revolucionado; b) mucho amago y bastante despiste.

A la mayor parte de las chicas les excita lo tierno, lo considerado y lo romántico: atrévete con esas atrevidas perversiones.

Buscad una postura cómoda para tí y para ella.

Sus genitales están más escondidos, el tacto seco puede hacerle daño. Para ayudar a la lubricación puedes usar saliva.

Utiliza tus dedos con suavidad.

En torno al clítoris (que es como un pene diminuto que también se pone duro cuando está excitado) es donde puedes encontrar su mayor sensibilidad. Sigue los dos trucos.

Recuerda que suavidad, lubricación, ritmo, presión y localización son imprescindibles.

Deja que ella con sus manos y sus gestos te vaya indicando, corrigiendo y ayudando.

TODO ES CUESTIÓN DE PRÁCTICA!!!

Su excitación es más lenta, sus orgasmos pueden ser varios.