Usarlo:
Siempre ANTES de iniciar la penetración vaginal, oral o anal (ANTES, adverbio de tiempo, NO DESPUÉS de un poquito…).
No usar los dientes para sacarlo de su bolsa (resulta muy toro pero puedes romperlo).
Cuidado con las uñas y dientes al colocarlo (puedes dañar el condón y el miembro a enfundar).
Cuando esté firme (¡Sr, sí sr!. cuando el pene este erecto).
PASOS: Coge el condón con una mano y presionando la punta colócalo encima del pene (asegúrate de que lo has colocado en la posición que te permita desenrollarlo para no hacer averías); con la otra mano desenróllalo con cuidado, hasta donde termina el pene (o hasta que encuentres el código de barras, si lo tuviera.)
Disfrutarlo:
¿Por qué no?
Lo sonidos guturales, posturas y movimientos son cosa vuestra. Podéis elegir (los dos) del catálogo universalmente conocido.
Se acabó:
Como todo lo bueno…
Tras eyacular (y antes de dormirse o saborearlo) retira el condón lentamente, sujetándolo por la base, sin que se dé la vuelta.
Si se queda dentro o se rompe: vete a la sección “Píldoras mágicas”.
Deshacerse de él:
Átalo (un nudo sobre sí mismo) y a la basura y no al suelo (son de usar y tirar).
No dejéis pruebas que delaten vuestro secreto.
Si continua el juego y hay otra penetración debéis usar otro nuevo (que no son reversibles!!!).